La meditación un estilo de vida

La práctica de la meditación es universal y hay muchas formas de llevarla al siguiente nivel. Si es la primera vez que la practica o no está seguro de cómo empezar, siempre es una buena idea contar con cierta orientación. Por eso hemos escrito este artículo con todo lo que necesitas saber para empezar a meditar.

Te ofrecemos varios consejos útiles que pueden ayudarte a empezar por el buen camino. Sigue leyendo para obtener más información y algunas ideas para que tu práctica de la meditación pase de ser «sólo por diversión» a algo más permanente y significativo.

¿Qué es la meditación?

La meditación es un tipo de autodisciplina que se describe mejor como «despertar del sueño de los muertos». Es una parte importante del crecimiento espiritual y puede utilizarse por varias razones, como conectar con tu yo superior, desarrollar una mayor perspicacia, ayudarte a centrarte en lo importante y tomar más iniciativas, o simplemente ayudarte a relajarte y disfrutar del momento.

¿Por qué empezar con la meditación?

Muchas personas creen que la meditación no es lo suyo. Les parece demasiado aburrida, no tienen tiempo o energía para ella, o creen que no es adecuada para su estilo de vida. La meditación es una práctica que puede realizarse en cualquier momento y en cualquier entorno.

No es algo que se haga una sola vez y no te estresarás ni te comprometerás demasiado con ella una vez que empieces.

¿Cómo iniciarse en la meditación?

La meditación es un proceso de recableado del cerebro. No es algo que ocurra una sola vez. Se necesita práctica para aprender a estar presente y abrir la mente a nuevos pensamientos y sentimientos.

Este proceso incluye la autorreflexión periódica, imaginar pensamientos y emociones de la vida pasada y hablar de ellos.

¿Qué herramientas existen para practicar la meditación?

Hay muchas formas de practicar la meditación. La forma básica es sentarse cómodamente con los ojos cerrados, inspirar lenta y profundamente con la mano derecha y, a continuación, soltar el aire lenta y profundamente por la boca con la mano izquierda.

Visualización: Esta puede ser cualquier visualización creativa que creas que sería efectiva para practicar la meditación. Puedes intentar visualizarte a ti mismo como un niño feliz y sano, o simplemente imaginar que tu público objetivo es una pareja de ancianos sentados juntos. hablando y disfrutando de su interacción social.

Grabación: Grabar tus imágenes mentales puede ser otra forma de practicar la meditación. Puedes probar a añadir un dispositivo de grabación o utilizar un programa informático que cree una grabación de audio de tus pensamientos o acciones de meditación. También puedes utilizar un sitio web con funciones de grabación.

Tipos de meditación

Existen muchos tipos de meditación. Puedes aumentar la variedad probándola durante uno o dos meses. Prueba diferentes tipos para ver lo que te viene bien y lo que no.

Meditación auditiva: Consiste en imaginar que hablas contigo mismo. Puede ser cualquier visualización creativa que creas que sería eficaz para practicar la meditación. Puedes intentar auditar tu casa o tu lugar de trabajo y hablar contigo mismo allí.

Meditación emocional: Consiste en imaginar que te pones en el lugar de otra persona. Puedes sentarte en una habitación con tu mejor amigo o en una habitación vacía e imaginar que tú eres esa persona. Meditación iridicudal: Consiste en imaginar que mantienes una conversación contigo mismo. Puedes hablar contigo mismo en un banco de datos o por teléfono. Trazar un mapa de tus pensamientos: Hay muchas formas de practicar la meditación.

Algunas personas prefieren visualizar lo que están pensando, mientras que otras prefieren escribirlo todo en un papel. Si te gusta escribir o tienes ideas que te gustaría compartir con el mundo, ésta es una buena forma de empezar. Sea cual sea el modo que elijas para empezar, asegúrate de practicarlo al menos dos veces al día.

Conclusión

La meditación es una práctica que puede practicarse en cualquier momento y en cualquier entorno. No es algo que se haga una sola vez. Se necesita práctica para aprender a estar presente y abrir la mente a nuevos pensamientos y sentimientos. Este proceso incluye una autorreflexión regular, imaginar pensamientos y emociones de tu vida pasada y hablar de ellos. La meditación es una parte importante del crecimiento espiritual y puede utilizarse por varias razones, como conectar con el yo superior, desarrollar una mayor perspicacia, ayudarle a centrarse en lo importante y tomar más iniciativas, o simplemente ayudarle a relajarse y disfrutar del momento. También puede utilizarse en la cabaña terapéutica o como herramienta para ayudar a las personas a superar sus sentimientos de inadecuación o vergüenza.

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